La Universidad de Illinois (EE.UU.) ha desarrollado su propio test rápido basado en saliva para detectar el coronavirus, que realizan dos veces por semana a los estudiantes, profesores y personal del centro que accede al campus, ubicado a unas dos horas al sur de Chicago, como parte de su plan de reapertura.
Los resultados del test, que hacen en cualquiera de los 17 centros de pruebas distribuidos por el campus, suelen estar disponibles en cinco horas (aunque pueden tardar hasta 48), según el sitio web de la universidad.
Cada persona que accede al campus se somete a una prueba inicial, teniendo después que hacerse el test dos veces por semana. Además de la prueba —que ha recibido la autorización de uso de emergencia de la Administración de Medicamentos y Alimentos de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés)— el centro ha desarrollado una aplicación mediante la que los estudiantes, el profesorado y el personal reciben los resultados de los test y los recordatorios. Asimismo, la 'app' les proporciona una imagen similar a una tarjeta de embarque que muestra el resultado negativo en una prueba necesario para acceder a los edificios del campus.
"Queremos aplastarlo"
Según el presidente de la universidad, Timothy Killeen, las autoridades universitarias habían detectado 248 casos positivos únicos hasta el viernes tras evaluar a 121.000 personas, lo que sitúa el porcentaje de pruebas positivas en la institución por debajo del 1%. Cuando alguien da positivo, queda aislado y sus contactos cercanos son notificados a través de la 'app' y también enviados a cuarentena.
"No nos gusta este virus. Queremos aplastarlo, y eso es lo que estamos haciendo, y lo estamos haciendo a gran escala", explicó Killeen en declaraciones a CNBC, agregando que, "si no le damos tiempo al virus para que se propague de un individuo infectado a otros, podemos detener su transmisión".
Etiquetas: